Se suele decir, que cuando el discípulo está preparado, el maestro aparece. Yo digo; que cuando un grupo está preparado aparece un proyecto, una obra para realizar.
Y nosotros como grupo, todos los componentes del grupo, aportamos cada uno nuestra parte.
En mi caso, la conexión que yo tengo con el otro lado del velo, he creado un lugar seguro, en el mundo de la Imaginación, esto es, una “Gran Pradera”, y allí se realizan diferentes conexiones, encuentros con otros seres para diversos trabajos o actividades a realizar.
Este grupo, o Círculo de Luz, estábamos preparados y queríamos realizar experiencias de maestría, en nuestro grado. Entonces, en este lugar de la Gran Pradera, se nos dio la imagen de un Iglú, y se nos dijo; que era una obra para realizarla y crearla aquí en la Tierra.
El grupo resonó instantáneamente con ella, y lo primero que nos dijeron es que; había que crearle un cuerpo físico, se lo creamos con las medidas que nos dieron, y nos dijeron que lo montáramos en un lugar donde la intuición nos llevaría, así llegamos a la cima de una montaña donde terminaba un camino.
El día que podíamos quedar todos fue el 7-7-7, que después nos enteramos que era un día muy especial y tenía total relación con toda la obra.
Nos dijeron que teníamos la colaboración de Gaia, nuestros seres superiores unidos, todos los seres de Luz que siempre estaban con nosotros ayudándonos, los Devas y elementales de todos los lugares que teníamos que ir, y la gran energía universal del Cristo Cósmico.
Les pedimos una confirmación física, que cuando montáramos el IGHLUZ que lo probaran con todos los elementos en acción. Era Julio y hacia un calor extremo, sin nubes, acabamos de montarle, y empezó a cambiar todo casi instantáneo produciéndose una precipitación de viento, lluvia y relámpagos increíble, quedando totalmente probado el IGHLUZ y confirmado la presencia de todos los colaboradores del otro lado.
Habíamos creado una conciencia grupal, y después, tuvimos un bautismo de Nueva Energía, donde se nos dio la primera fase de la obra.
Empezó esta obra del IGLÚ, con el nombre de: "ÍG-LUZ"
Como energías... ÍG: Ígneo, Fuego... y LUZ: Luz del Fuego... "LUZ DEL ALMA".
Siendo un lugar con energía propia, siempre dispuesta para ayudar a quien lo solicite, y con ello, se active para siempre: LA LUZ DE LA ENERGÍA INTERNA DEL SER HUMANO, SU PROPIO PODER Y LIBERTAD CON ESTA CONEXIÓN, SIN TENER QUE DEPENDER DE NADIE.
(Preguntas a la energía del ÍG-LUZ)
-¿Cómo nos puedes explicar tu existencia?
“Yo soy una creación vuestra, me habéis creado con una intención pura y libre, para mi creación vosotros habéis puesto los 3 primeros pilares más elevados de vuestro grado: Luz, Amor y Unidad.
Vuestra Conciencia Grupal me ha creado con vuestra intención pura, con estos 3 pilares, y me ha dado libertad para expandirme y crecer, ahora soy una energía en su creación inicial, cuando me creéis un cuerpo físico tendrá un efecto conveniente a las necesidades espirituales para lo que he sido creado.
Al crearme con intención pura y libre, poco después, ya se ha creado otro pilar, el pilar de: “Libertad”, no existe ninguna limitación, dentro de mi cuerpo físico y energía, puede ser posible TODO lo que el Alma de cada Ser quiera realizar o crear, sin olvidar el carácter de la ayuda de mi energía como Luz, Amor, Unidad y Libertad, a la que se une la persona para conectar con su Ser en ese tiempo y espacio, al entrar en el ÍG-LUZ físicamente, en su energía”.
La 1ª Fase de la Obra del ÍG-LUZ terminó, cuando se creó su cuerpo físico, donde implantamos un cristal que habíamos recibido cuando terminamos otra obra, de otro grupo en otro tiempo y espacio, siendo esta obra una continuación de la otra.
La 2ª Fase empezó, con el compromiso interno de cada uno/a, un bautismo de Nueva Energía, para realizar la obra por recibir, que ninguno sabíamos que podría ser.
Después de implantar el primer cristal con decisión y pasión… y al demostrar esta actitud tan unida, decidida y favorable, recibimos el resto de la 2ª Fase. En esta 2ª fase se nos asignó realizar 7 implantes con cristales, en el centro exacto de la Península Ibérica, como centros de la propia energía de los pilares del Igluz: Luz, Amor, Unidad y Libertad.
En el eje central se han creado siete implantes, 6 en la tierra, en círculo, y 1 en el agua, en el centro, (con el sentido que tiene la tierra y el agua como cuerpo de Gaia).
Después recibimos que son desde el centro, dos círculos de 7 y 14 Km., con 7 centros en cada círculo, cubriendo todo Madrid.
Al cubrir Madrid, terminamos la 3ª fase, y criamos terminada la obra, pero se nos comunicó que la obra tenía 7 fases, saliendo del centro de la Península Ibérica, una geometría sagrada con 7 círculos y 7 centros en cada círculo, creando unas líneas exactas y círculos perfectos hasta la costa. En total se nos asignó realizar 56 implantes, con la energía del ÍG-LUZ en los lugares exactos dentro de dicha geometría sagrada
Para llegar hasta aquí con éxito, nos fue necesario librar muchos obstáculos y demostrar una apreciable sabiduría. Creándose con ello el pilar de Sabiduría en el Igluz.
Ya tenemos todos los puntos de la geometría sagrada, en sus medidas exactas dispuestos en el mapa de toda la Península Ibérica, esperando ser creados, implantados y activados. El día 11 de Noviembre de 2007 (11:11), empezamos, y la intuición nos llevó y llevará al lugar exacto de todos los implantes.
Seguidamente recibimos lo siguiente: “El trabajo que estáis realizando ha pasado de ser terrestre a estado Solar, cambiando también en su simbolismo del nombre Íg-luz, con una “H” intermedia”: “IGHLUZ”[1]. Todas las fases las estamos recibiendo todos los componentes del grupo a la vez, como conciencia grupal.
Terminando la Obra con elevada vibración, gran Amor y plena satisfacción y alegría por el trabajo muy bien realizado.
Esta experiencia la realizamos con la intención pura de servir en colaboración y ayuda a nuestra madre Tierra y a la humanidad, en este tiempo crítico de transición.
En el lugar asignado de cada centro, nos situamos en círculo para proceder al acto, uniendo nuestras energías o conciencia grupal en una sola. Manifestando cada uno/a nuestro compromiso con la energía del pilar asignado, realizando una ceremonia.
Este Círculo de Luz, para realizar toda la Obra del IGHLUZ, ha necesitado el transcurso de 2 años, con una riqueza espiritual individual y grupal, tan amplia y sorprendente como nunca nos podríamos imaginar.
Primero recibimos el inicio del proyecto, después se formó un grupo al que este inicio le resultaba como suyo propio desde muy dentro de su Ser, creando una gran pasión por empezar a realizarlo.
Sólo sabíamos el inicio, y no teníamos ni idea del alcance que podía tener, sólo dependía de nuestra actitud al realizar el inicio, y enseguida nos dimos cuenta de la grandeza de la Obra que empezábamos a contemplar.
Al crear el inicio, nos pareció relativamente fácil, después nos vino el siguiente paso, que ya era más difícil, y el siguiente aun más… repito que: “Cuando un grupo decide hacer prácticas de maestría, recibe el proyecto adecuado”.
Como estamos diciendo, el contenido de la Obra lo íbamos recibiendo conforme la íbamos realizando, y si nos hubiesen dado el proyecto completo, con toda seguridad lo habríamos considerado muy excesivo para nosotros, y no lo hubiésemos ni tan siquiera empezado, desestimándolo como imposible.
Tenemos que reconocer, que como siempre, la Obra nos la han ido presentando con mucho amor y sabiduría, contando con nuestras posibilidades y libertad, pareciendo siempre como si fuera una Obra de creación propiamente nuestra, pero nosotros sabemos, que así es el maravilloso trabajo amoroso de nuestros maestros de Luz, de los que tenemos muchas anécdotas de su clara presencia de muy diversas formas, en todo el recorrido de estos dos años creando la Obra.
Con la Obra del IGHLUZ, hemos creado en la Península Ibérica (España y Portugal) 56 Centros con los diez pilares en cada centro, con nuestra presencia y nuestra intención, hemos realizado una pequeña ceremonia y enterrado en cada Centro un cristal, con la energía impregnada de Luz, Amor, Unidad, Libertad, Sabiduría, Alegría, Paz, Armonía, Gratitud y Verdad, proporcionada en cada ceremonia con tal fin.
La Obra del IGHLUZ está creada. Ahora, cada uno/a, diariamente activamos todos los Centros, desde el centro de la Península, se van expandiendo los 7 centros, de cada uno de los 7 círculos, hasta el último que toca la costa, recitando la ceremonia cada uno/a, a la hora que lo estime conveniente, y situando la energía de la conciencia grupal en el eje central, desde donde se expande a los Centros de los círculos siguientes hacia el exterior.
Las personas que quieran emplear la energía libre de la obra del IGHLUZ, fuera de la Península Ibérica, implantan como mínimo tres cristales, y desde ese centro, expanden igualmente toda la energía hasta el infinito.
Toda la energía de estos diez conceptos de los pilares, está representada simbólicamente como una esfera, el Centro o eje de la esfera lo representa el “Yo Soy UNO”, de este centro o eje sale hacia el perímetro de la esfera en unión como radios con los 10 pilares, cerrando toda esta potente energía con la esfera, simbólicamente como Nueva Energía.
En cada uno de los 56 Centros de toda la Obra, está la potencia de cada esfera, y cuando se activa el eje o Centro con la ceremonia de activación, provoca una explosión de infinitas esferas en todas las direcciones, tocando a todos los seres y activando la propia energía que tenga afinidad, si no es afín, no presiona y sigue su camino para activar energías receptoras. El UNO se convierte en muchos sin dejar de ser UNO.
Quedando actualmente el IGHLUZ con 10 pilares: “Luz”, “Amor”, “Unidad”, “Libertad”, “Sabiduría”, “Alegría”, “Paz”, “Armonía”, “Gratitud” y “Verdad”.
Con esta obra, hemos allanado el terreno de la Península Ibérica y hemos puesto los pilares de unos cimientos vivos, ahora nosotros nos consideramos guardianes de estos cimientos que activamos todos los días, y sobre los cuales se están edificando otras obras, como ciudades de Luz… y muchas otras diferentes.
La Obra del IGHLUZ es mucho más rica de lo que sólo hemos expuesto aquí, es una energía libre e infinita, para ayudar a sanar cuerpos y almas, con la única intención de unir entre sí a todas las personas y grupos… los Círculos de Luz entrelazados.
Considerando que tiene una gran relación la obra del IGHLUZ, con todas las obras que se están realizando en la Península Ibérica, por los diferentes grupos… Esto lo decimos por experiencia, como Círculo entrelazado con otros Círculos.
Como por ejemplo; participamos con la bajada de cristales de los Arcturianos, estuvimos en Montserrat de Barcelona y también estuvimos con ellos en Rocigalgo el monte más elevado de Toledo de 1.444 m., donde nos dieron un cristal con una canalización que nos anunciaron que había un corredor de Luz entre Montserrat de Barcelona, Rocigalgo de Toledo y el Cerro de los Ángeles de Madrid, en este cristal y la energía del IGHLUZ que es movible donde se monte.
Enterándonos después, que el lugar, la cima de la montaña donde nos llevó la intuición para probar el IGHLUZ, está al lado de este acontecimiento que realizamos en Rocigalgo.
La energía del IGHLUZ es libre e infinita y nosotros somos sus guardianes, manteniéndola siempre viva y activa, pero en este año 2010, el año de la Verdad y colaboración en Unidad, ofrecemos la activación y beneficio de esta energía a todos los Trabajadores de la Luz que les resuene internamente. Creando un GRUPO-CÍRCULO de activación diaria en beneficio de Gaia y la Humanidad, y también como grupo de potenciales sanadores en servicio de las diferentes necesidades que vayan surgiendo.
Los componentes de este Grupo-Círculo tienen que considerarse en sí mismo con cierta medida elevada de todos los conceptos de los 10 pilares, para activarla con su propia energía, si no se tiene esta energía o estado de conciencia, y por el contrario tienen miedos, inseguridad y desequilibrios, es lo que aportarían de sí mismo, y no es adecuado para el cometido de este Grupo-Círculo.
Esta obra con su energía libre es infinita, con todos sus potenciales activos para ponerlos en servicio, como puede ser sanación de cuerpo y alma para despertar conciencias, y está conseguida en total colaboración de muchos seres de Luz del otro lado y nosotros creándola y activándola a diario físicamente, y de toda esta cuadrilla de ángeles a nuestro servicio, tenemos continuas manifestaciones de su constante colaboración presente, y actualmente le pedimos una demostración de su presencia física, para presentarla a los que quieran colaborar con la obra, siendo ello esta fotografía.
Y con esta intención de unir a todas las personas y grupos que quieran compartir sus proyectos, para colaborar todos con todos, estamos en el Cerro de los Ángeles de Madrid –España-, aprovechando esta energía con sanaciones de cuerpo y alma, los últimos domingos de cada mes, para conocernos en alegre convivencia, y para que la unidad de todas las personas y grupos sea una realidad.
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