Problemas de todas clases: de salud, de trabajo, de familia, de estado emocional, de cambios, de relaciones humanas, de convivencia, de clima, de política, de economía doméstica e internacional.
Y como si esto fuera poco, la Tierra se mueve, el clima cambia y los meteorólogos son casi magos para predecir qué sucederá mañana.
El mar se agita acompañando a nuestra amada GAIA que continúa con sus trabajos de “Parto” y ¿nosotros…?
EQUILIBRISTAS DE ESTA ERA DE TRANSICIÓN.
como este personaje de la imagen,
a veces nos sentimos un poco cascoteados por las circunstancias, pero mis amados Hermanos: ARRIBA EL TEMPLE, LA ENERGÍA DE LUZ Y CONTINUEMOS ESTA AVENTURA DE AMOR.
Tratemos de no magnificarlos, alimentarlos con miedo o temores de un futuro incierto, pues nuestro Padre Creador SIEMPRE está a nuestro LADO, extendiendo su mano, calmando nuestros vaivenes anímicos.
Queridos Hermanos no podemos perder la ALEGRIA por los problemas, aunque estos traten de ocupar nuestra mente e intenten afincarse en nuestro corazón, NO HERMANOS, NO podemos permitirlo, pues es tanto el amor que sentimos por nosotros mismos y por nuestros Hermanos, que el temor, la impaciencia, la tristeza, la soledad, deben fluir, salir de nosotros con la misma rapidez como cuando entraron.
Vean este video y después seguimos con el tema.
Siempre encontraremos que hay otro problema más grande que el nuestro, como una cadena interminable, pues los comparamos, los afincamos y se agrandan un poco más cada día, con los ingredientes que le vamos agregando: dudas, miedo, desconfianza, confusión, etc., etc…
Hay que atravesarlos, avanzar a través de los problemas, desarmarlos con AMOR y MUCHAS GANAS DE SER FELIZ.
Un camino que nos llevará a solucionar los “problemas” es la UNION de nuestros CORAZONES bajo un mismo Latir: el AMOR INCONDICIONAL ¿Les suenan estan dos bellas palabras?
Otra palabra que cambia nuestro vivir es la Hermandad, el saber que si tú te sientes mal y yo estoy aquí para escucharte, acariciar tu corazón herido
y después soltarte… para que continúes tu propia aventura.
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